En primer lugar, tenéis que hacerla VOSOTROS, para saber qué es lo que lleváis y dónde. Hacer la mochila es bastante fácil pero si no sabemos como lo sufriremos en nuestras espaldas...
Antes de hacer la mochila tenéis que tener en cuenta:
Revisa las características y elementos de tu mochila para aprovechar sus posibilidades:
Antes de cargar la mochila, debes conocer todas las opciones de sus cremalleras, tirantes, extensiones de carga, bolsillos laterales, superiores o inferiores, sistema de hombreras, cinturones, etc. La mayor parte de las mochilas se ajustan a la persona.Antes de ponernos a guardar todo dentro de la mochila: conviene extender toda la ropa y cosas varias (por ejemplo encima de la cama) colocándola por tipos de ropa o por bolsas y así, con la visión global, nos será más sencillo comenzar a guardar. Procura que no queden huecos vacíos o mal aprovechados y conseguirás una mochila mas uniforme. No pasa nada porque las cosas vayan apretadas a tope, de hecho es lo más normal.
Prepara personalmente el equipaje, para saber qué cosas llevas y dónde las llevas: Ocurre muchas veces pensáis que no tenéis algo y lo que pasa es que vuestros padres os hicieron la mochila.
Distribuye el peso para que la mochila quede bien equilibrada.
El centro de gravedad de la mochila debe ir a la mitad para impedir que tire del cuerpo hacia atrás. Es decir, a la hora de cargarla, lo más ligero y/o menos necesario deberá ir en la parte inferior (ropa de repuesto, etc.). Lo más pesado se instalará preferentemente en los dos tercios superiores de la mochila. Este detalle facilitará un mejor control de la carga y una mayor estabilidad al estar alineados el centro de gravedad de la mochila y el de la persona. Ponte la mochila y comprueba que está equilibrada. No importa que sientas que pesa, es normal, pero sí que vaya correctamente sobre los hombros y espalda.
Coloca los objetos en función de su utilidad:
Las cosas de más uso en la parte superior o en los bolsillos laterales y las de menos uso irán más al fondo. El saco de dormir lo sacarás a las pocas horas de llegar al campamento, por lo que no lo coloques en el fondo de la mochila a no ser que tu mochila tenga un compartimento para el saco (piensa en tu comodidad para el primer día de campamento). Debemos intentar situar las cosas siempre en un orden lógico. Por ejemplo: primero los pantalones, luego las camisetas, y luego los jerséis (o como tú creas más útil). Acordándote del orden elegido, usarás mejor tus cosas, durante el campamento. No coloques objetos duros o puntiagudos en la parte de la espalda para que no te molesten.
No cuelgues cosas por fuera de la mochila:
Se pueden llevar cosas aprovechando los amarres o cintas exteriores de la mochila (expresamente diseñadas para eso), pero lo que no es bueno es “colgar” cosas para llevarlas como un cencerro de vaca, molestándote y golpeando o enganchándose con todo o perdiéndose incluso. La esterilla aislante, enrollada, se suele sujetar bastante bien con las correas exteriores de la mochila, en la mayoría de los modelos.
Las cosas pequeñas, como calcetines o ropa interior:
No es una norma, pero sí es muy recomendado llevarlos repartidos en bolsas de plástico tipo supermercado. Cuando necesito un par de calcetines sé que están en esa bolsa y es mucho más fácil tenerlos ordenados, limpios... es un truco muy práctico, cómodo y ordenado. De lo contrario, imagínate los calcetines todos sueltos ¡vaya lío!
También puedes hacerlo con otras prendas. Los demás utensilios como la linterna, documentación, etc, se suelen meter en los bolsillos laterales u otros especiales de la mochila grande o en la mochila mediana, riñonera, etc.
En la mochila de la marcha es esencial llevar lo mínimo, intentar compartir con los compañeros las cosas comunes. Pensad en casa cómo podéis quitar peso, cada gramo cuenta, por ejemplo, coger toallas que pesen poco,mantas finas, gel y champú pequeños, ropa fina pero que caliente... con un poco de imaginación seguro que conseguís quitaros peso antes de llegar al campamento.
Además revisar en casa que tenéis todas las correas de la mochila para después poder ajustarlas antes de comenzar a andar, es muy importante que queden bien ajustadas al cuerpo para aliviar peso y que no este la mochila colgandera